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domingo, 24 de febrero de 2019

BLOG 28 - EL BIOMÉDICO NECESITA IDENTIDAD Y RECONOCIMIENTO ¿QUÉ HACEMOS?




La tecnología nos alcanzó intelligeos. Avanzó tan rápido que no tuvimos tiempo de desarrollar la filosofía con la que debíamos aplicarla. Queremos pensar que por las necesidades demandantes en salud, le dimos prioridad a desarrollar los equipos para salvar la vida, olvidando algo todavía más importante: La bioética tecnológica.

¿En qué momento olvidamos desarrollar nuestra identidad? ¿Qué hicimos para que nuestra profesión no fuera tomada en cuenta? ¿Por qué hay muchos ingenieros biomédicos mal pagados? ¿Por qué si la necesidad existe, no se contratan? ¿Por qué en muchos hospitales el biomédico es sólo una máscara para pasar las demandas de COFEPRIS y no utilizado como una herramienta de progreso? ¿Por qué la tecnología médica continua subestimada? ¿Dónde quedó la filosofía que compromete a la bioética y las prácticas correctas? ¿Dónde están nuestros principios hipocráticos? ¿Por qué razón tenemos que baratear nuestro trabajo? ¿Qué acaso nuestra labor no es igual de digna? ¿Por qué si somos profesionistas, muchos de nosotros no ganamos más de 6mil mensuales? ¿Enserio se cree que no somos fundamentales?

Muchos de ustedes me dirán: A mí no me pagan 6mil mensuales, yo gano más. Qué bueno por ti amiguito, pero somos muchos más los que estamos iniciando, batallando y sobreviviendo con ese sueldo. Tal vez no tuvimos la misma suerte o simplemente no sabemos vender y estamos aprendiendo. Sigamos.

Como siempre lo hemos dicho, la biomédica es un pilar importante para sostener un hospital.
Actualmente la biomédica está tomando mucho revuelo (es una carrera que las universidades venden con el nombre “multidisciplinaria, pero creemos que sigue faltando algo). Sólo basta con ver las estadísticas laborales y nos daremos cuenta que año con año, son más las universidades las que ofertan la carrera y que año con año la cantidad de profesionistas también aumenta. Esto quiere decir que ¿Si las universidades están abriendo espacios  para la biomédica, entonces existe una demanda en crecimiento? Bueno, eso no es del todo  correcto.

Vamos a echar un vistazo:

En la gran mayoría de los hospitales públicos y privados no existe como tal el nombramiento de ingeniero biomédico,  a muchos de nosotros nos contratan con perfiles distintos (administrativos o técnicos de mantenimiento), exigiéndonos actividades que no se relacionan necesariamente con nuestra preparación.

Entonces el primer paso es: Vamos a explicarles a los hospitales qué hace un ingeniero biomédico, cómo podemos aportar soluciones, qué necesitamos para mejorar la condición actual, cómo podemos prevenir fallas a pacientes, qué procesos son necesarios para mejorar la atención: ¡IMPLEMENTACIÓN DE UN DEPARTAMENTO DE BIOMÉDICA!

Basados en nuestra corta experiencia implementando departamentos ingeniería biomédica, podemos afirmarte con la mano en la biblia que: Vender una idea es más difícil que vender un equipo médico. Es muy simple: Ve a tu hospital más cercano y ofrece un equipo médico. Posteriormente ve a ese mismo hospital y vende el concepto de ¿Por qué necesitan un ingeniero biomédico? te darás una idea de porque afirmamos lo anterior.

Entonces imagina un momento, si ni siquiera existe un perfil de contratación ¿Cómo esperamos que contraten a un biomédico si no saben QUÉ HACE un biomédico? Interesante paradoja.
En segunda instancia, los hospitales que ya cuentan con ingeniero biomédico, lo tienen limitado para la toma de decisiones. Simplemente contratan a un ingeniero biomédico para las acreditaciones y certificaciones, pero después le quitamos poder y lo dejamos haciendo actividades básicas, a veces no  necesariamente de ingeniería biomédica.

En tercera instancia nos enfrentamos a un medio que fue barateado por personas que no tienen la mínima idea de que es la ingeniería biomédica y el respeto que se le debe tener. Personas con mucho capital que venden equipamiento médico sin siquiera preguntarse ¿Cómo impacta la tecnología que vendo en una persona? ¿Realmente conozco las implicaciones legales que este trabajo con lleva? Y es que el problema no es el negocio, el problema es que tampoco desean cambiar ese estado mental. Suena drástico, pero si no lo señalamos ¿Cuándo lo vamos hacer?

Por otro lado necesitamos establecer convicciones, nosotros como biomédicos tenemos una responsabilidad hacia nosotros mismos y hacia nuestros terceros. Nos toca cuidar a las personas que nos rodean. ¿De qué sirven tantas materias en la escuela, si no tenemos un gramo de empatía y respeto por  nuestro entorno?

Necesitamos una identidad y para lograrlo debemos hacerlo todos.

¿Cómo lo hacemos? ¿Cómo creamos una identidad profesional? ¿Cómo mejoramos todas nuestras condiciones laborales? ¿Cómo logramos el reconocimiento?

Te vamos a contar una historia, una de muchas de cuando implementamos departamentos de ingeniería biomédica. Prepara tu café, tus galletas y tus ojos, comenzamos:
Un día estábamos en la escuela y honestamente sentíamos que necesitábamos hacer algo más que sólo ir a clases, llegar a casa, hacer tareas y dormir. Como dice el dicho: Dios los hace y ellos se juntan. Necesitábamos algo más.

Decidimos reunirnos esa tarde en la biblioteca de nuestra escuela y llevamos hojas blancas, plumas y un marcador. Teníamos la intención de hacer un plan de trabajo para la implementación de un departamento de ingeniería biomédica y lo íbamos a terminar.

Imagínate un momento, éramos estudiantes de 5to semestre, desarrollando un plan para la implementación de un departamento de ingeniería biomédica, para cualquier hospital que nos dejara hacerlo.

El primer demonio que debes enfrentar, es el miedo al fracaso. Porque una vez terminado el plan de trabajo nos llovieron una bola de dudas: ¿Quién va querer contratar a unos estudiantes de ingeniería biomédica sin experiencia? Ni siquiera nos van a recibir ¿Para qué vamos? No conocemos a nadie, la vamos a regar.

Lamentablemente ese miedo bloquea muchos de nuestros objetivos en la vida. Lo llamaremos: El maldito miedo.

Imagina por un momento, estudiantes de ingeniería biomédica de 5to semestre haciendo un plan de trabajo para la implementación de  un departamento de ingeniería  biomédica en un hospital que no sabe lo que hacemos.

No teníamos ningún conocido, no sabíamos a qué hospital asistir, no teníamos recomendaciones, jamás habíamos implementado uno y por si fuera poco: Nadie de nosotros sabía vender chido.
Pero teníamos un arma secreta: Google.

Bueno, pues fuimos a tocar puertas. Para no hacerte el cuento largo, 4 hospitales (Que actualmente ya tienen su departamento porque nos hablaron 2 años después) nos cerraron las puertas, bajo el argumento:

“Llevamos 30 años trabajando así, nunca hemos necesitado de un biomédico, gracias”
Pero no todo estaba perdido, llegamos de pura suerte a otro hospital que no mencionaremos por respeto y prudencia. El director médico nos escuchó con mucha atención y sin pensarlo nos dijo: Nos vemos la siguiente semana para iniciar el proyecto.

La vida se compone de oportunidades que a veces tú entregas y otras veces te tienen que entregar.
Llegamos a ese hospital muy emocionados el primer día. En la siguiente lista vamos a enumerar los golpes bajos que recibimos y nos hicieron más fuertes:

1.       Para empezar no había lugar para nosotros, nos mandaron al sótano donde guardaban los triques y si con eso no te agüitas: A lado estaba el mortuorio ¿Imaginas el miedo que sentíamos cuando oscurecía? Ese cuartillo tenía alacranes, olía a humedad y la señal de internet no llegaba.
2.       No teníamos herramienta. Le preguntamos a los de mantenimiento y solo tenían unos cuantos desarmadores, pinzas y llaves. Nos dijeron que el trabajador anterior se peleó con el hospital y se robó casi toda la herramienta.
3.       Empezamos a generar información estadística de las condiciones del hospital y para serte sincero, nadie nunca la vio. Siempre la entregábamos, siempre la mandábamos por correo pero en las juntas nadie nos preguntaba y consultaba.
4.       Nos dimos cuenta que nadie tenía idea de nada: Había inventarios de hace 10 años, había equipamiento médico guardado de hace 5 años y otros en uso de hace 30 años, no existían los planos del hospital, nadie sabía dónde estaban los contactos eléctricos principales, las condiciones del agua y tuberías etc.
5.       Nos llamaban los “bioquímicos”.

¿Te das cuenta de las condiciones con las que iniciamos? A un con eso seguimos adelante, ya estábamos ahí, teníamos que desarrollarlo y terminarlo. En esa etapa de aprendizaje entendimos muchas cosas, la más importante: Que necesitábamos hacernos de una identidad y un respeto.

Empezamos por realizar las actividades de gestión de equipamiento médico: ¿Cuántos hay? ¿Qué sirve y qué no sirve?

Posteriormente después de clasificados, les realizamos su identificación y generación de información para sus bitácoras. Pedimos al director unas carpetas y empezamos a documentar.
Pasaron los meses y no veíamos un cambio radical, hasta que…

Nos llamaron un día en la noche: Bioquímicos podrían venir al hospital, tenemos un problema con la esterilizadora, no funciona y necesitamos tener todo para antes de las 8, pues tenemos 5 cirugías que no podemos cancelar. Ya notificamos al proveedor de servicios y dice que está en México, que no puede llegar hasta mañana ¿Qué hacemos?

Nos asustamos y le dijimos: Llámele al biomédico, nosotros somos los  bioquímicos.
Aquí es donde debes ser muy observador: Las oportunidades más grandes son aquellas que vienen ocultas en un fracaso o en un problema interesante.

Pues fuimos.

Lo resolvimos, si admitimos que tardamos 3 horas en entender que era una esterilizadora y dónde se prendía (Nos enamoramos de esos sistemas) pero al final no nos ganó. Al día siguiente realizaron las cirugías y comenzó a correrse la voz de nuestra victoria en los altos mandos.

Nos mandó llamar el dueño: Muchachos muchas gracias por apoyarnos ayer, sin ustedes habríamos  tenido que cancelar las cirugías. Gracias por su apoyo. De ahí empezamos a ganar más confianza, hasta que contrataron a uno de nosotros y fue un hecho el departamento de ingeniería biomédica, nos movieron del sótano, nos dieron una oficina y nos empezaron a decir: Biomédicos.

A partir de ese momento empezamos a trabajar en la construcción de nuestra imagen y lugar en el hospital. Poco a poco las personas comenzaron a reportarnos problemas y se creó una relación de confianza. En las juntas nos tomaban más en cuenta, e incluso nos pedían asesoría para la revisión de propuestas económicas y evaluación de proveedores.

Ahí estábamos, estudiantes de 5to semestre dirigiendo un departamento de biomédica, no fue la universidad, no fue una recomendación, no fue un contacto, fuimos nosotros con el sudor de la frente.
Suena muy sencillo, pero no es nada fácil. Esa primera experiencia nos formó un carácter. Actualmente ya hemos implementado 5 departamentos en el estado de Guanajuato y tenemos nuestro chaleco antibalas muy bien puesto. Esas experiencias nos formaron como equipo.

Entendimos que para mejorar poco a poco nuestro gremio, teníamos que empezar desde nuestra persona cambiando nuestras creencias.

1. Primero debemos creer en nosotros mismos. Confiar en que somos una herramienta importante para los hospitales y por tanto deben contratarnos. Nada de que: “No estoy listo o me falta experiencia”. Cree en ti y arriésgate. Te recomendamos que leas “Don Quijote de la Mancha”, una vez que hayas leído muchas historias de caballeros andantes, conviértete en uno y desafía a tus molinos de viento.

2. Segundo: Trabaja en equipo. Cuando recibes los golpes del fracaso y frustración, es mejor hacerlo en compañía, así las balas no se sienten tan feo. Muchas veces hemos fracasado como empresa, a veces sentimos que el mundo se nos cae encima, pero sabemos que al final nos vamos a reír de esto.

3. Tercero: Edúcate, instrúyete, síguete preparando, la carrera empieza cuando terminas la escuela. Hay una gran diferencia entre la escuela y el mundo real: En la escuela aprendes y practicas cosas y lo peor es reprobar un examen, en la vida real te pones a prueba, no puedes poner en riesgo la vida de una persona. Pero en las 2 también existen los dieces.

4. Adáptate: Ningún trabajo es el ideal, tendrás que ser flexible y hacer tu trabajo con los recursos que tengas a la mano. No te arrepientas de esta hermosa carrera, al contrario, tómalo con filosofía y disfrútalo. Ya vendrán tiempos mejores, paciencia.

5. Valórate como ingeniero biomédico, hagas lo que hagas: Ventas, servicio, clínica, investigación o consultoría. Todo esfuerzo por mejorar el mundo, siempre aportará un granito para cambiarlo, muchas veces no te darás cuenta, pero así es.

6. Muchas veces sentirás que nadie toma en cuenta tus consejos, tus reportes, tus observaciones, y sentirás que nadie valora tu esfuerzo. Tranquilo, todos estamos igual, lo importante es que debes seguir pateando hasta que ellos se cansen.

7. Comprométete con tus valores, no te corrompas, la corrupción es una enfermedad tan profunda que poco a poco debemos abatirla con pensamientos correctos, palabras correctas y acciones trascendentales.

8. No pises a otros profesionistas, instrúyelos, capacítalos, guíalos. Cuando ya no estemos aquí, sólo nos recordaran aquellos que ayudamos, enseñamos  y no dejamos solos. Impúlsalos.

9. Entiende que todos somos maestros y aprendices, acepta que no lo sabes todo y que es aceptable pedir ayuda.

10. El ego en exceso es enfermizo y destruye a las personas, mantén los pies en la tierra.
Es válido criticar nuestras acciones y cambiar nuestras creencias. Somos más la gente buena.

Gracias por leernos intelligeos, agradecemos su tiempo.
Gracias a mis compañeros de trabajo, cada esfuerzo va para ustedes. Gracias por ser mi fortaleza de la soledad.

Fotografía tomada de la página de facebook: Dr. muchacho

Beto de biomédica.

2 comentarios:

  1. Necesitamos una identidad y para lograrlo debemos hacerlo todos.

    ¿Cómo lo hacemos? ¿Cómo creamos una identidad profesional? ¿Cómo mejoramos todas nuestras condiciones laborales? ¿Cómo logramos el reconocimiento?

    Yo soy un convencido que para crear una identidad profesional primeramente las instituciones académicas que ofrecen la carrera deben tener una idea , y digo idea, homogenea de lo que es la carrera y la profesión en sí, además contar con profesionales de la Ingeniría Biomédica para que formen parte de su equipo de profesores, en muchas de las instituciones que la ofertan los profesores no son Ingenieros Biomédicos, ¿como entonces puede tener una identidad el IB si quienes los forman no lo son? Por otra parte el que los SIB y el trato al IB dentro de las unidades médicas no sea el que deseamos tiene mucho que ver con la capacidad profesional que demuestre el IB y sea aceptado en el equipo de salud de la unidad médica, esto se demuesta "sabiendo mas que los médicos" en la interacción de la tecnología con los pacientes, conocer las implicaciones clíncias del uso y aplicación de los equipos médicos, conocer los resultados esperados dada una terapia, etc. lo anterior se logra con práctica y buena guía y si las instituciones academicas carecen de hospitales escuela estamos entonces en desventaja para poder obtener concimientos prácticos de la clinica médica y su interacción con la tecnología. En mi experiencia , no pasé por eso la UAM tenía un acuerdo con el ISSSTE cunado yo me formé y mis profesores eran los primeros especialistas en el área. Ahí fui desde becario hasta Jefe de Servicio del SIB y Yo acordaba con el Director del Hospital, formaba parte del cuerpo de gobierno como Jefe de Ingeniería Biomédica, participaba en la desiciones relaciondas con la tecnología del hospial y asesoraba al director en estos rubros. El SIB se encargaba de todo el preventivo, control de calidad, una parte del correctivo y de la capacitación continua del personal del hospital y éste estaba en un lugar dentro del Hospital y posteriomenete en uno especial, nunca estuvimos en el sótano. Que el área médica te reconozaca como parte de su equipo en salud es una trabajo arduo y constante en demostrar conscimientos y capacidad de resolución de los problemas de la vida diaria en un hospital. Eramos 10 ingenieros y todos eramos reconocidos en nuestras áreas de responsabilidad. Podría escribir un libro aqui sobre esto. Saludos

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  2. Muchas gracias por leerme, enserio agradezco el tiempo. buena aportación de su parte!

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