De cómo explicarle a tu mamá, que tú no puedes dar recetas médicas.
Estábamos viendo Dr. House, en
eso, un grupo de médicos reciben a un paciente grave en el área de choque, por
accidente automovilístico. En la escena, un doctor corre a tomar el carrito de
paro y desfibrilar al paciente.
Yo todo emocionado le expreso a
mi mamá: ¡mira, ese es un desfibrilador lifepack 12, mira esa camilla es
hillrom, ese monitor de signos vitales es un dash 2500, ¿si ves mamá? Todos
esos equipos son monitoreados y revisados por biomédicos.
En eso mi mamá me mira y me dice:
¿pero que tú no vas por el hospital con tu bata blanca y revisas pacientes? Yo
pensé que eras como un doctor…
Si mamá, soy un doctor de máquinas
médicas…
¿y eso cómo funciona? ¿Entonces
no haces medicina?
No mamá, nosotros no hacemos
medicina, hacemos algo que me gusta más: Aplicamos ciertos conocimientos de
ingeniería en diferentes áreas de la salud, para mejorar la atención a los
pacientes. Somos como antihéroes anónimos.
Mira te voy a platicar:
Cuando estábamos en la escuela,
recuerdo bien estudiábamos el módulo de cardiología. Nuestro profesor, nos
explicaba el concepto de cardiomiocito, potencial eléctrico y nodo sino
auricular. Durante nuestra formación debemos entender el principio fisiológico
y anatómico de los órganos, con el objetivo de comprender desde una perspectiva
lógica, la relación de sistema y órgano.
Algo que me llamó muchísimo la
atención, es que el profesor no buscaba que nos aprendiéramos los tejidos, las
partes o el funcionamiento a detalle clínico. El buscaba que nosotros
tuviéramos más un conocimiento del principio elèctrico y viéramos al corazón
como un arreglo de cables que generaban el movimiento mecánico para bombear
sangre a todo el cuerpo.
Eso me pareció tan interesante, pues siempre había visto al corazón como un globo, que a partir de cierto movimiento generaba un bombeo. Era y sigo siendo un neófito. El profesor nos decía: Vamos a entender los cables que conforman el corazón, vamos a entender donde se ubica la bobina inductora y vamos a comprender por donde fluye el amperaje que va generar que tengamos un movimiento sincronizado. Imaginemos que el corazón es el motor que ayuda a que todo nuestro sistema tenga la alimentación suficiente para sus operaciones vitales. Es como una bomba de gasolina de un carro.
El corazón tiene por objetivo
mover la sangre, desplazarla a un volumen, presión y flujo, a partir de
válvulas check anti retorno llamas mitral y tricúspide, entre otras. Estas
válvulas check se encargan de que la sangre fluya hacia una sola dirección y
garanticen que vaya por las tuberías principales del cuerpo. Las arterias
pulmonares y cavas. Imaginen, todo nuestro cuerpo está conectado por un sistema
tan complejo de tuberías a diferentes áreas transversales, diferentes
longitudes, diferentes formas y diferentes divisiones. Aunque ustedes no lo crean, la mecánica de fluidos
manda en los principios dinámicos de la sangre. ¿lo habían visto?
El cuerpo humano es el resumen de ingeniería que hizo algún
creador que no jugaba a la suerte. Es una maquina misteriosa.
Me acuerdo mucha mamá que este maestro nos ayudaba a
visualizar cada sistema del cuerpo humano; como sistemas de ingeniería de
control. Algo que me fascinaba, era encontrar conocer el modelo fisiológico y
con ello compararlo con el modelo ingenieril.
Por ejemplo, ¿sabías que la
biomédica puede modelar el movimiento peristáltico del sistema digestivo? ¿Para
qué? Actualmente muchos pacientes con diálisis peritoneal, les conectan un
catéter de “cola de cochino”, que tiende a perderse, y para reubicarlo se tiene
que abrir al paciente. Eso implica aumentar el grado de una probable infección
y disminuir el tiempo de calidad de vida. Imagina mamá, podríamos desarrollar
mejores catéteres que no se pierdan dentro de la panza.
Otra cosa, ¿te has preguntado cómo funciona el cerebro?
Cuando una persona tiene problemas de alzhéimer o epilepsia, es porque existe
en el cerebro un corto circuito, un problema eléctrico por la ausencia de
mielina o mal funcionamiento de la sinapsis, como cuando se bota un fusible y
se cancela el suministro para la casa. Eso pasa más o menos pasa en el cerebro,
aunque de manera compleja: las neuronas se vuelven locas y su comunicación deja
de ser aislada y tenemos cortos circuitos en todo el cablerio. Un día la
biomédica va ayudar a que esos cables ya no se crucen.
O imagina mamá, cuando una
persona tiene insuficiencia renal, quiere decir que sus riñones, básicamente ya
no llevan a cabo la filtración de sangre y por tanto se inventaron las máquinas
de diálisis y hemodiálisis, las cuales suplen el daño en los riñones,
lamentablemente esas máquinas son bien grandes y caras y no todos tienen manera
de pagarlas. Imagina un día que vayas a la tienda de órganos, imprimas uno para
ti y te cambien las refacciones. Un día la biomédica va acercar todo eso, para
que muchas vidas se salven.
El secreto de la biomédica es aplicar los conocimientos de
ingeniería, no nadamas aquellos técnicos, también aquellos bioéticos, regulatorios,
normativos, estadísticos y de gestión. Mira mamá, la biomédica toca muchísimas
áreas, las cuales apenas se están desarrollando y otras que están por nacer. Yo
pienso que nuestra función actualmente no está comprendida, porque mucho de lo
que hacemos está por definirse. El futuro es hoy, ¿oíste viejo?
Cuando la gente me pregunta, ¿Qué es lo que más te gusta de
la biomédica? Siempre le digo: Me gusta entender al cuerpo humano desde una
visión más técnica, relacionándolo a sistemas de ingeniería de control. Pienso que,
si Dios existe, de seguro estudió alguna ingeniería.
Honestamente pienso que la vida misma no tiene ningún
sentido y que una de nuestras obligaciones es darle respuesta a la pregunta
¿qué hacemos aquí? Creo que constantemente nos planteamos diversas respuestas,
pero pienso que una manera de devolver al universo el que nos haya brindado la
oportunidad de vivir esta travesía, es a partir del conocimiento de nuestro
entorno.
Es como si nos hubieran dicho:
Ten, toma, es tu viaje, descúbrelo.
Lamentablemente son muchos los
factores que nos determinan como personas individualistas. No sé en qué punto
de nuestra educación, decidimos pensar solo en nosotros y pintar nuestras
fronteras para ver al otro caer. También de eso sufre la biomédica.
Mira mamá, talvez no andemos en
bata blanca y no se nos permita llevar acabo alguna práctica médica, pero
nuestro trabajo cuenta mucho. Como siempre he dicho: Un doctor es tan
paracetamol, como el biomédico tan fusible.
Faltan por definirse muchas
reglas del juego, lamentablemente aún existen muchas deficiencias que debemos
resolver, aún existen muchas negligencias que debemos detener y mucha
tecnología médica que implementar.
Te invito a que hagamos de la
conciencia, una herramienta para nuestra profesión. Hagamos las cosas bien.
Beto de biomédica.